Pista: Taberna Casa Martana (Zaragoza), un bar para mi barrio

Jun 10, 14 Pista: Taberna Casa Martana (Zaragoza), un bar para mi barrio

Según el grado de aprensión, al ver cráneos y esqueletos suspendidos sobre la barra de Taberna Casa Martana, esas cabezas de bonito seco, esas grandes raspas y el bacalao desecado, uno puede pensar que se adentra en ese bar a escasos cien metros de la casa donde Leatherface se afanaba en desollar scream queens para la barbacoa familiar. La escena, no obstante, la dulcifica la presencia de los parroquianos del barrio donde se ubica el Palacio de la Aljafería, principalmente de los bloques situados entre la residencia real y el río Ebro. Porque Casa Martana es eso, un bar de barrio, gobernado por la sencillez y los precios populares, pero distinguido por una oferta con ese nosequé de toda la vida que escapa de lo cotidiano.

Letrero en Casa Martana (foto: Cuchillo)

Letrero en Casa Martana (foto: Cuchillo)

Pizarras y carteles pintados a mano advierten de la posibilidad de comer «bocatines» de bacalao, tomate y piquillo; caballa de Motril; arenque con pipirrana y mostaza; salmón marinado con vinagreta de mostaza; bonito seco con salmorejo; jamón ibérico; cecina equina a la trufa; quesos artesanos de oveja y cabra; chorizo picante; mojama con almendras; sardina; guardias civiles… Y da gusto contemplar a la encargada distribuir unte e ingredientes principales en el pan tierno, crocante, recién calentado en el grill. Pulgas sabrosas que hacen caro al mismísimo 100 Montaditos. Con una calidad, y un cariño, muchísimo mayores. Casi todos los bocatitas cuestan 1,25 euros, y así hasta las franquicias low cost parece que abusan de nuestra candidez, nuestras prisas y nuestro bolsillo.

Casa Martana, con toda su austeridad y su llaneza, ubicada donde hasta bien poco estaba el bar Amozara, es, en suma, una de las tabernas que me gustaría tener en mi barrio.

(Igor Cubillo)

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Río Guatizalema, 2; 50003 Zaragoza (Aragón)

La oferta de Taberna Casa Martana, surtida de salazones y embutidos, tiene muchas similitudes con la de La Tasca de Blas, ubicada en el mercado de la Avenida de Cataluña. Además de montaditos, incluye banderillas clásicas, gratinados (patata rellena de bacalao confitado, cabrales con anchoa…) y raciones a 6,50 euros: mojama de atún, huevas de moruca, jamón de Teruel, queso de Ocaña, cecina de potro, lacón gallego, ibéricos…
Una mañana de domingo cualquiera, en Casa Martana (foto: Cuchillo)

Una mañana de domingo cualquiera, en Casa Martana (foto: Cuchillo)

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