Viva Palencia con P. Una ruta de once sabores y experiencias

Dic 05, 13 Viva Palencia con P. Una ruta de once sabores y experiencias

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Cargando...Me gusta Palencia. Con P. Es un sitio de verdad, auténtico. Una provincia llena de contrastes y de paisajes. Con un norte de alta montaña y un sur de amplias planicies, un mar de campos. Palencia (con P) aún no ha sido descubierta por el turismo masivo, ni creemos que lo será en el futuro, pero como los lectores de esta WEG son gente con un criterio muy superior a la media suponemos que les gustará conocerla. Porque conocer Palencia es volver a visitarla. Uno cuando está en el secreto de sus paisajes y de sus mesas y productos tiene mucho ganado. Una tierra horizontal, austera, religiosa sin aspavientos ni extremos. Un bella desconocida, un must para los vigilantes de aves, para los degustadores del mejor Románico. Para todos aquellos que creen haberlo conocido todo en la gastronomía española y no han probado la menestra palentina, sus sopas de ajo o, ¡sonido de trompetas y fanfarrias!, su lechazo.

La semana  pasada nos convocaban para conocer algunos de sus mejores productos en una jornada divulgativa. Allí volvíamos a encontrarnos con empresas de las que somos clientes desde hace años, no en vano, en Palencia hemos pasado largas temporadas y nos hemos sentido como en casa. La presentación de Alimentos de Palencia: una Marca de Referencia tuvo el formato de una Jornada Gastronómica, organizada por la Diputación de Palencia y el CETECE, Centro de Innovación de productos agroalimentarios de Palencia, con la colaboración del Grupo Peñascal y el Centro Integral Boluetabarri, en cuyas instalaciones tuvo lugar la sesión.

Allí también disfrutamos de las recetas que un hiperactivo y simpático Fernando Canales elaboró con la materia prima palentina.

El Señorío de Los Manueles y el Señor Canales, ¡respect!

El Señorío de Los Manueles y el Señor Canales, ¡respect!

Experiencia 1 y 2

Podemos empezar por la Capital, Mi ideal de ciudad es una urbe de las dimensiones de Palencia la city. De Palencia, con P, no con Uve (y que me disculpe Uve). Palencia es, como se dice de su catedral, una bella desconocida. Alejada de las rutas turísticas sus encantos son discretos, recogidos y austeros. Puedes pasear por su calle Mayor. Puedes disfrutar de su catedral, de San Antolín, de su gótico, de su románico e incluso de los restos visigóticos que atesora. En concreto, de su cripta, que data del año seiscientos, y que fue construida por el rey Wamba (el de las zapatillas).

Otro de los grandes tesoros de Palencia son sus sopas castellanas y los asados de lechazo, de los que ya hablamos en anteriores posts palentinos. Eso y un ritmo de vida sosegado, y la luz castellana, y el frío del invierno, y el calor de verano. Tierras, campo de batalla desde el medievo y granero de las españas.  En Palencia también podemos encontrar  la singular Iglesia de san Miguel, románico tardío con una pedazo torre de apariencia militar que quita el sentido. Los expertos dicen que la torre se hizo por aquello de los saqueos y allá, en la iglesia, se casaron nada menos que Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, y su esposa Doña Jimena. Vivan los novios (o en este caso Vivar, el novio).

Experiencia 3 y 4

Creada en 1989, la empresa Selectos de Castilla está ubicada en la localidad de Villamartín de Campos y  cría patos en semilibertad, alimentados con hierbas y cereales  que se dan en abundancia y de muy buena calidad en las proximidades de la Laguna de la Nava. El embuche se realiza de manera manual y la elaboración es totalmente artesanal, sin la utilización de aditivos. De Selectos nos quedamos con el pate a la pimienta verde, suave, muy suave. Y de paso, a tiro de piedra, los amantes del Bird Watching tiene una parada de aves espectacular en la laguna mencionada.

Experiencia 4, 5, 6, y 7

Tierra de Campos, foto by dicky

Tierra de Campos, foto by dicky

Situarse en un altozano en Tierra de Campos,  por ejemplo desde el castillo de Belmonte de Campos, es ver un mar verde en primavera, dorado en verano, ocre en otoño e invierno. Pocos  paisajes están tan ligados a la agricultura. Puedes disfrutar con su contemplación o, como el general Máximo Décimo, pasear entre las mieses y acariciar voluptuosamente sus espigas.

No se quede con las ganas y haga como Máximo, toque trigo

No se quede con las ganas y haga como Máximo, toque trigo

La quesería artesanal Hermanos Paramio, situada en Tierra de Campos, fue fundada en enero de 1994 con el fin de producir y comercializar productos derivados de la oveja churra. Desde su fundación se ha dedicado al mantenimiento e incremento de la cabaña ganadera, así como a la elaboración de quesos semicurados, curados y añejos de leche cruda de oveja churra. En 2009, comienzan a comercializar lechazos de su propia explotación, pre-cocinados y envasados en lata de conserva.

También en el centro de Tierra de Campos encontramos, en Villarramiel, las cecinas de los Hermanos Caballero Rojo. En los años sesenta, Julio Caballero fundó la fábrica en la que comenzó a elaborar cecina de equino de forma artesanal. Posteriormente, en los años 90, se diversifica la actividad y se empiezan a elaborar otros embutidos equinos, como chorizo o salchichón. Para aquellos que no conocen la cecina, advertirles que este es un embutido a ser descubierto. Su sabor, solo, o con un aceite de oliva virgen, no tiene que envidiar a los grandes jamones o a otros embutidos de abolengo.

Muy cerca, está mi muy querido Meneses de Campos. Una localidad pequeña, austera con una iglesia de mérito, Nuestra Señora del Tovar, y que recogemos aquí por ser el fue señorío de la casa de los Manueles y también donde se inventó la tortilla.

En efecto, el pueblo fue señorío de los Téllez de Meneses, una de las familias de ricos hombres de Campos más importante e influyente a lo largo de siglo XI-XII. Desde el siglo XIV fue señorío de los Manueles, y desde finales del siglo XV de los Guzmán, que recibirán el título de Marqués de Montealegre y Señor de Meneses. Los que más huella sentimental dejaron fueron los Téllez, tal y como reza en una inscripción de la iglesia del lugar. “Si queréis saber quien son los dorados arneses hijos de la hija son del rey Ordoño de León y del Tello de Meneses”, que corresponde a una leyenda que ha pervivido entre los viejos del lugar, la leyenda de la Infanta, recogida por Lope de Vega en una de sus comedias titulada Los Tellos de Meneses, en la que nos presenta a una infanta leonesa que cuando debía ser entregada a los moros en virtud del tributo de las cien doncellas, al que se había comprometido el rey Mauregato, como expresión de vasallaje al emir árabe de Córdoba, para evitar ser entregada a los moros, huye de la corte de su padre y busca refugio en un pueblo de Campos, Meneses, donde permanece de forma anónima sirviendo en casa del rico del lugar. Pasado el tiempo el rey Ordoño llega de cacería al pueblo siendo hospedado por los Tellos, los cuales le obsequian con una comida. La infanta, que sabía que a su padre le gustaba la tortilla o malasada, prepara una y en su interior introduce su anillo, el rey la reconoce, la perdona y la dio por esposa al hijo mayor de don Tello.

Dicky en el balcón, qué emoción

Dicky en el balcón, qué emoción

Entre los múltiples sucesos históricos acaecidos en esta villa palentina y no menos importante fue el pregón que yo mismo ofreciera en su día y que tengo en mi memoria como surrealista, entrañable y memorable. Sólo me falto decir, desde el balcón de la localidad, y con todo el gentío en la plaza “como alcalde vuestro que soy os debo una explicación y esa explicación os la voy a pagar».

No es una excusa, es la esclusa. foto by dicky

No es una excusa, es la esclusa. foto by dicky

Por la zona cruza, también,  el Canal de Castilla. Este canal sirvió antaño para transportar cereales desde Castilla hasta el Norte en barcazas. Actualmente no se puede disfrutar de las esclusas, que fueron suprimidas, pero sí de este lugar que forma parte de la historia. A lo largo de sus 207 km. se reparten 49 esclusas, que salvan un desnivel máximo de 141,90 m., 4 acueductos, 3 represas, 66 puentes, 4 dársenas, muelles, molinos de harina y papel, un batán, una ferrería, varias centrales, varios astilleros y diques secos. En los caminos de sirga del Canal, hay posibilidad de realizar interesantes rutas en bicicleta.

 Experiencia 8 , 9, 10 (y 11)

El Camino de Santiago Palentino tiene dos hitos. Dos Joyas imperdibles. Por un lado está Villalcázar de Sirga. Alcázar por su  relación con la orden del Temple y de sirga por aquellos que sirgaron las naves que surcaban el antes comentado canal. Los caballeros templarios construyeron la iglesia de Santa Maríala Blanca en el siglo XII, un templo-fortaleza digno de ser visitado y casi adorado. Una belleza por la que el propio Camino de Santiago hizo un desvío para que los peregrinos se asomaran a su espectacular interior. Si estamos muy cansado de andar el camino siempre podemos reponer fuerzas con un asado de lechazo palentino en el Mesón de los Templarios.

Cerca muy cerca esta Carrión de los Condes y su Iglesia Románica de Santa María del Camino, excepcional en su conjunto, una de las mayores de su estilo y con un reseñable conjunto de decoración en las dovelas del pórtico sur. El decorado describe temas de la vida cotidiana: entre otros, actividades profesionales, el vicio, el pecado y animales fantástico. Todo un reportaje de la época. El salvame deluxe de la Edad Media.

En el mismo Carrión encontramos el Horno la Peregrina que  fue inaugurado en 2004. En el proceso de elaboración de sus productos no se emplea aditivos, colorantes ni conservantes. La impronta queda marcada por utilizar oliva virgen extra para las frituras; nata procedente de vaca y chocolate puros, en pastelería y masa madre para elaborar el pan. Como debe ser.

 Dicky del Hoyo

Periodista, multitarea, en red desde bastante antes de Internet. Le ha dado y le da a todos los palos de la comunicación: cultura, política, nuevas tecnología, prensa, radio, televisión e Internet. Aunque es del mismo centro de Bilbao es un poco Zelig por los afectos y se mimetiza perfectamente, allá por donde va, con el paisaje y el paisanaje. Cree que a este mundo hemos venido para disfrutar y en eso se empeña, sólo o en compañía de otras. La comunicación gastronómica es sólo una excusa para pasarlo bien y dárselas de connosieur.

@zuloko en twitter

dicky@delhoyo.com 

2 Comentarios

  1. Nada que disculpar, Dicky. Al contrario. Al igual q tú, amo Tierra de Campos. Adoro su color y su olor, sus atardeceres, la bondad de sus gentes. Su silencio infinito. Sus dichos y refranes. Su cultura. ¿La gran desconocida?

    • Dicky del Hoyo /

      Ya tenemos otra cosa en común. Cierto es la gran desconocida y mi egoísmo desea que así siga. Los que no la conocen se la pierden…y los que sí ganamos 😉

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