¿Conocéis el chiste de ese alemán que sin tener ni idea de español entra en un restaurante y decide pedir el primer plato que oiga encargar a un paisano? El pobre berlinés, que odia desde niño con toda su alma el chucrut, oye de refilón la palabra «repollo» y dice, como un loro: «repollo». Le sacan un enorme perol de la verdura cocida y lo acaba como buenamente puede. Cuando piensa que ya nada puede empeorar su elección para el segundo plato, oye al mismo paisano que dice «repito»… y así acaba el chiste.

Eso, o algo parecido, nos paso el otro día en nuestra primera visita al León de Oro. Habíamos oído a la «intelgentsia» culinaria que era un «must» para los exploradores de nuevos sabores y allí fuimos atraídos por su fama de sitio duro pero diferente. Este es el chino a que los sucios gaijines jamás acudirían y eso nos mola. Y vaya si nos estrenamos. Desdeñamos con suficiencia la carta semitraducida y adaptada al gusto europeo y nos decidimos por la opción riesgo. Doble o nada.

Y es que, en una de las paredes del restaurante hay una guía gráfica de los platos para elegir como los guiris hacen en Benidorm. Tu ves el plato y lo señalas. No debes esperar que te expliquen qué has elegido, porque ellos no tienen ni repajolera idea de castellano ni falta que hace. Y así nuestra elección fue similar a la comida exótica con la que le obsequiaron a Indiana Jones en la segunda e infumable película de la saga. De primeros unas patas de pollo en vinagre, droga dura. para nuestro descargo decir que en la foto tenían otra pinta. De segundo, una especie de setas diminutas en vinagre. Y los dim sum de apariencia apetitosa estaban rellenos de una verdura inclasificable que sabía a perejil. En definitiva, una sabia elección.

Prometemos nueva visita pero la próxima vez iremos con la lección aprendida. O lo echaremos a cara o cruz. Esperemos que no sea «repito» lo próximo que elijamos.

(Se comió las patitas cocidas en vinagre como un campeón el dicky)

El León de oro

C/ Fernández del Campo 8

Bilbao

+34 944 435 646

Las patitas del León de Oro.

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Periodista y gastrósofo. Heliogábalo. Economista. Equilibrista (aunque siempre quiso ser domador). Director de Suite, el único foro gastronómico sin cocineros de este país.

igorcubillo.com