En primer lugar, dejar claro que la presente opinión se ciñe exclusivamente al menú del día que À Table ofrece los días laborables a un precio algo más alto de lo normal (16 + IVA), que pretende ser original y distinguido pero se queda claramente en el intento. No merece en absoluto la pena gastarse el dinero en el mismo, dado que por ese precio, o inferior, hay menús mucho más conseguidos, satisfactorios y de mayor valor gastronómico. La gente o ya lo sabe o pasa de gastarse ese dinero entre semana, dado que en nuestra visita la única mesa ocupada era la nuestra.

El menú consistió en tres platos (raciones medidas) más postre. Lo desgloso a continuación: tomate de la huerta con un poco de pasta (espirales) que, sin duda, fue lo más potable, aun cuando es un plato fácil, carente de mérito culinario alguno y cualquiera puede zampárselo en su casa. Luego vino un puding de cabracho muy normalito y aderezado con pimienta (?). A continuación, bullabesa de bacalao, que constituyó la gran decepción del menú con un pescado carente de la mínima calidad. Mal.

Como postre, una tarta de mousse de arroz con leche que, sin estar mal, no consiguió quitarne la decepción caudada por lo degustado. Esperaba algo más. Ah, el agua era de grifo y el vino de mesa.

Local pequeño, en una calle fea y no excesivamente segura. Servicio amable. Supongo y espero que a la carta sea otra cosa porque, si no, mal futuro les veo.

(dandy)

web de À Table

c/ Dos de Mayo, 18; Bilbao

94 415 47 66

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Periodista y gastrósofo. Heliogábalo. Economista. Equilibrista (aunque siempre quiso ser domador). Director de Suite, el único foro gastronómico sin cocineros de este país.

igorcubillo.com