Leche de oveja Gaza. Trifásica y fetén
Hola, titanes, hoy debuto en LQCDM, esta weg, con un texto sobre la leche de oveja de Gaza, que es el copón de la baraja. Uno prueba este néctar «garantizado en granja» y piensa que esta noche, en vez de contar ovejas, haría bien ordeñándolas. Ganaderos de Zamora se lo curra desde 1966, cuando la empresa fue bautizada Grupo Sindical de Colonización (luego se transformó en Central Lechera de Zamora) y comenzó a garantizar unos ingresos fijos a cientos de familias de la provincia. Hoy día, agrupa 76 explotaciones ganaderas y de sus tetas sale leche que posteriormente se empaqueta pasteurizada, sin lactosa, con chocolate y con calcio natural; o transformada en cuajada, arroz con leche, natillas o nata. 80.000 litros diarios de leche de vaca y 5.500 de oveja dan para llenar más de un camión cisterna. Qué txapeldunes.
La de oveja, concretamente, es una leche fetén; contiene leche parcialmente desnatada y estabilizante E-339, y cada sorbo es un chute en tres fases. La primera impresión es que entra más fresca que la mar salada. La segunda, sabe a cuajada, como si chuparas la ubre a la misma oveja; se caga la culebra. La tercera, es un delicado postgusto agrio que aporta contraste y deja ganas de dar otro refrescante trago y más lametazos. Esta leche atómica se sale del mapa. Demasié para el cuerpo.
(Manuel de Jorge)
Ctra. de Almaraz, 1; 49026 Zamora
980 53 46 20
rvizan@gaza.es
¿Qué dice la gente? Def Con Dos. ¿Qué dice el envase de la leche de oveja semidesnatada Gaza? Que su sabor es suave y agradable; más razón que un santo. Que sus proteínas son más fáciles de digerir; de nota. Que tiene el doble de calcio que la leche de vaca, y casi el doble de fósforo; flipa en colorines. Y que su aporte de proteínas es un 60% mayor; el delirio. Para chuparse un montón de vasos.
Guisandero, reportero dicharachero y camarero del Titanic. De pequeño me caí en la marmita de tinta de chipirón. Cuando meto tripa dicen que me parezco a Laura Gemser y me habrán visto dando la talla en la pantalla. Me dicen El Negro porque otros escriben mis textos; así le doy la vuelta a la tortilla (qué bien traído).
DISCLAIMER: todo me parece fetén, no me se alboroten productores y anunciantes. En mi sección, todo el monte es orgasmo.
Si, pero de «regalo» viene con el estabilizante e-339… ¡Mi gozo (de Gaza) en un pozo!
Efectivamente, Don Aditivo, la leche Gaza contiene fosfatos de sodio, que lo mismo se utilizan en la tintorería que en carnicería. Pero ya lo indica el texto de Manuel de Jorge, eh, nosotros no escondemos nada.
¿Considera que eso descalifica a esta leche, que con el E-339 pierde todo atractivo?
Muchas gracias por su comentario.