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Sushi y Wasabi. ‘Ven’

Publicado por Cuchillo en Momentos Musicales | 0 comentarios

Mar 22, 13

Hay gente que está donde está por su apellido. No es el caso de Sushi y Wasabi, que están donde están (en el espacio reservado cada viernes al Momento Musical de Lo Que Coma Don Manuel) por su nombre. La gastronomía japonesa inspiró el bautismo de un dúo de pop sencillo, chispeante y algo tontorrón, en ocasiones, formado por Mai Vega y Dani Kussa, dos sevillanos afincados en Barcelona.

Su discográfica, Flor y Nata Records, alude a ellos como una «mezcla de sabores» merecedora de «tres tenedores Michelin» (sic). Y lo plasma en estas tres frases: «La puesta en escena resulta una salsa consistente basada en unos músicos potentes, el toque entre explosivo y salado de un Dani Kussa incapaz de estar quieto, y el dulce nada empalagoso de Mai Vega. Los ingredientes son conocidos, pero la gracia está en cómo y en la proporción al mezclarlos; y eso a Sushi y Wasabi les sale como a los grandes chefs». Ahí es nada.

Os dejamos con el clip de ‘Ven’, una producción audiovisual, con caperucitas durmientes y lobos de peluche, además de pompas de ‘Kill Bill’ naïf, que sólo se aproxima a la comida en esta frase: «Somos dos imanes de color en un frigorífico».

(Cuchillo)

Imagen promocional de Sushi y Wasabi: Dani Kussa y Mai Vega.

Cuchillo

Es el pequeño de los Cubillo Brothers. Nació en 1991, en el mismo Bilbao, es más de salado que de dulce y acostumbra a disociar, con lo cual cambia de apariencia física con frecuencia. Como Robert de Niro antes de rodar Toro Salvaje, pero a lo tonto, por la cara. Él es más de toro tataki. Aprendió pronto que Dow Jones no es un cantante, le incomoda la fama de criticón, pues siempre ha sentido simpatía por el débil, y una máxima guía su proceder: «más vale que zozobre, que no que zofarte…». Católico practicante, que no celebrante, en su bautizo el párroco ofició vestido de Elvis, cantó himnos y salmos, y entonó el ‘Burning Love’. Vio la luz el día que se fotografió con Ferran Adrià y el de L’Hospitalet de Llobregat le puso una mano sobre el hombro al tiempo que decía: «Cuchillo, la gastronomía es el nuevo rock and roll». Amén.