Quién está detrás de Don Manuel
Y él (Jesús) le preguntó (al hombre): – ¿Cuál es tu nombre? – Mi nombre es Manuel, pues somos muchos. Este bello sucedido ha identificado prácticamente desde su nacimiento, en el cada vez más lejano marzo de 2010, a Lo Que Coma Don Manuel, una weg de evidente esencia gastronómica en la que ha tomado parte una larga lista de ilustres colaboradores. Juntos, pero no revueltos. El ideólogo y director de facto de la publicación es Igor Cubillo, redactor curtido durante tres lustros en el diario El País, entre otros cometidos.
No obstante, cuando le vayan a buscar los grupos especiales de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Cuchillo señalará, sin mediar gran amedrentamiento, a su mano derecha: Dicky del Hoyo, web master de la cosa y responsable de redes sociales.
Dicky del Hoyo Periodista, multitarea, en red desde bastante antes de Internet. Le ha dado y le sigue dando a todos los palos del periodismo: cultura, política, nuevas tecnología, prensa, radio, televisión e Internet. Trabaja para medios y también hace labores de asesor para empresas y entidades. Aunque es del mismo centro de Bilbao es un poco Zelig por los afectos y se mimetiza perfectamente, allá por donde va, con el paisaje y el paisanaje. Cree que a este mundo hemos venido para disfrutar y en eso se empeña, sólo o en compañía. Estar en @lqcdm y la comunicación gastronómica es sólo una excusa para pasarlo bien y dárselas de connosieur.
@zuloko en twitter
El placer es nuestra guía, y nuestro desahogo compartir lo disfrutado y/o padecido en los cientos de mesas que hemos visitado. Estamos fuera de los círculos del compadreo gastronómico y somos obreros de la palabra en los trabajos con los que nos pagamos las comidas. Por eso cuidamos la forma y el fondo de lo que contamos. Porque tan importante es lo que se cuenta como que se entienda lo contado. Somos Don Manuel. Respect! PD: si comer es un placer y el placer es un pecado, pequemos y no nos arrepintamos.
El patriarca de esta cosa. Considera que el acto de comer es uno de los placeres más enormes que nos ha procurado la existencia. Y a eso se aplica. Y a contarlo.
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