¿Te comerías un gorila de montaña?
Corren tiempos oscuros para quienes estamos enamorados de la anguila europea. Tras años de consumo desaforado, intrusismo chino, prohibición de exportación y contrabando, la especie vive un momento dramático, hasta el punto de que el reclutamiento, el número de angulas que llega a nuestras costas tras el desove de las madres en el remoto mar de los Sargazos, ha caído más del 90% en comparación con las cifras de los años ochenta. Su población se ha reducido hasta ese punto en el cual se encienden las alarmas y no han sido pocos los llamamientos a detener temporalmente su consumo dada la situación de ‘peligro crítico’, paso previo a la extinción.
“Está más amenazada que el águila imperial ibérica, el lince ibérico, el panda gigante o el gorila de montaña, especies cuyo pobre estado de conservación es mucho más conocido”, aseveraba recientemente un comunicado de Euro-Toques. Así, la organización internacional de cocineros (aúna a más de 3.500 de 18 países) remite a las sugerencias del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES) a la hora de pedir “veda total, cero capturas”. Y señala a sus colegas: “los cocineros y cocineras debemos comprometernos a no utilizar en nuestros restaurantes especies y productos amenazados con desaparecer”.
¿Hasta cuándo? Hasta lograr la esperada recuperación, aunque a falta de paro biológico se opte por el paro hostelero. Hasta entonces, surimi a cascoporro o trampantojos como el observado y degustado ayer en Bakea (🔪🔪🔪), donde Alatz Bilbao apuntala su compromiso con la salvación de la angula sirviendo largos fideos de nabo daikon.
Periodista y gastrósofo. Heliogábalo. Economista. Equilibrista (aunque siempre quiso ser domador). Tras firmar durante 15 años en el diario El País, entre 1997 y el ERE de 2012, Igor Cubillo ha logrado reinventarse y en la actualidad dirige la web Lo que Coma Don Manuel y escribe de comida y más cuestiones en las publicaciones Guía Repsol, GastroActitud, Cocineros MX, 7 Caníbales, Gastronosfera y Kmon. Asimismo, vuelve a firmar en El País y es responsable de Comunicación de Ja! Bilbao, Festival Internacional de Literatura y Arte con Humor. También ha dirigido todas las ediciones del foro BBVA Bilbao Food Capital y fue responsable de la programación gastronómica de Bay of Biscay Festival.
Vagabundo con cartel, se dobla pero no se rompe, hace las cosas innecesariamente bien y ya han transcurrido más de 30 años desde que empezó a teclear, en una Olivetti Studio 54 azul, artículos para Ruta 66, Efe Eme, Ritmo & Blues, Harlem R&R ‘Zine, Bilbao Eskultural, Getxo A Mano (GEYC), DSS2016, Den Dena Magazine, euskadinet, ApuestasFree, eldiario.es, BI-FM y alguna otra trinchera. Además, durante dos años colaboró con un programa de Radio Euskadi.
Como los Gallo Corneja, Igor es de una familia con fundamento que no perdonaría la cena aunque sonaran las trompetas del juicio final, si es que no han sonado ya. Sostiene que la gastronomía es el nuevo rock and roll y, si depende de él, seguiréis teniendo noticias de este hombre al que le gusta ver llover, vestirse con traje oscuro y contar historias de comida, amor y muerte que nadie puede entender. Eso sí, dadle un coche mirando al sol, una guitarra y una canción, una cerveza y rock and roll, y no le veréis el pelo más por aquí.
Tiene perfil en Facebook, en LikedIn, en Twitter (@igorcubillo) y en Instagram (igor_cubillo), pero no hace #FollowBack ni #FF.
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