La Seu (Dénia). Una excepción en la oferta de batalla de Loreto

Jul 22, 13 La Seu (Dénia). Una excepción en la oferta de batalla de Loreto

«Merece la pena, por lo menos, entrar a tomar un vinito y ver el restaurante La Seu». Esto nos dejó escrito la amable Ángela, nuestra guía dianense, de cara a nuestra visita a la cabeza de Marina Alta. Y no se equivocaba, pues La Seu merece una visita tanto por su propuesta gastronómica, donde la chef Diana Cervera pretende aunar tradición e innovación, como por su moderno diseño arquitectónico. Por ambas cosas, constituye una excepción en la oferta muy de batalla de la concurrida calle Loreto.

Mi vista de La Seu (f: Cuchillo)

Mi vista de La Seu (f: Cuchillo)

El edificio, cuyo origen se remonta al Siglo XVI, se divide en tres plantas. Abajo se reparten numerosas mesas, algunas de las cuales ocupan un patio convenientemente cubierto, para proteger a los comensales del sol y del calor. En la primera planta hay otro comedor más pequeño, una cocina donde se imparten cursos y talleres y, al otro lado, diez naranjos que embellecen la vista. En la segunda, unos cuartos de baño de diseño. La reforma que ha experimentado el edificio es francamente espectacular. Un acierto.

Luego, la carta no es especialmente barata (foie a la brasa sobre fartón valenciano caramelizado con horchata, 16 euros; tartar de atún con huevas de wasabi, 22; lomo de angus black premium con verduras de temporada, 24), pero a diario se ofrece un «menú degustación» bien atractivo. Merece la pena optar por él, aunque sea algo más caro que en la mayoría de la competencia. No obstante, nosotros, que teníamos el día saleroso, decidimos solicitar el atractivo menú de esa jornada (seis tapas, arroz a elegir y postre, por 22 euros), pero también sumar un par de gambas rojas de Dénia a la brasa, que se despachaban a ‘únicamente’ 4 euros la unidad. Fue un acierto pues, recién aterrizados en Alicante, nos supieron estupendamente. Nos gustó tanto el sabor como la atractiva presentación, y Bego exclamó «es roja hasta la tripa». Bella y sabrosa, así es ella.

Las patatas de La Seu (f: Cuchillo)

Las patatas de La Seu (f: Cuchillo)

Antes llegó pan con tomate y torrajo de all-i-oli, una formula mucho más fina que el típico y extendido cuenco, una variación en la que la salsa se presenta gratinada, ya extendida sobre rebanada de pan; en esta ocasión, aunque rico, era un poco raquítico.

Entonces fue el turno de la ensalada templada de queso de cabra, membrillo y frutos secos. Se trataba de un mezclum con muy poco queso y buen sabor, aunque incluía un troncho considerable… Feo.

A continuación llegaron las referidas gambas, unos ricos buñuelos de bacalao con su brandada y un carpaccio de atún con vinagreta de setas, de sabor cítrico. La cosa marchaba bien, y aun mejoró. Según anoté, lo hizo en cuanto llegaron a la mesa unas patatas a la pobre con ibérico; yo, que soy muy macarra, exclamé «qué buenas, tío», cuando las probé. Bien sabrosas y envueltas en una película, a mi acompañante le recordaron a las patatas del estofado. Lo mejor del estofado.

Arroz abanda, en La Seu (f: Cuchillo)

Arroz abanda, en La Seu (f: Cuchillo)

La coca de berenjena a la brasa con presa de angus estuvo a la altura. Nada aceitosa, como nos sucedió en algún otro local. Y de entre los arroces ofrecidos descartamos el meloso de embutidos de la Xara y el meloso de bacalao, cebolla y alcachofas, para decantarnos por un clásico arroz abanda. Correcto.

El postre del día consistía en tiramisú y copa de fruta de la pasión, y la casa invitó a chupitos de mistela (también ofreció orujo de hierbas), un buen cierre para una comida satisfactoria. Buena relación calidad precio. Y algo más: «Me está sorprendiendo. Y un sitio que te sorprenda por 22€ es la leche», afirmé en un momento de la comida. Me quedo con eso.

Como no acostumbramos a comer con agua, la cuenta fue algo más abultada, eso sí. Realmente pagamos 71,90 euros (dos personas), pues hay que sumar las gambas (8 euros), café solo (1,90) y también dimos buena cuenta de una botella de Casta Diva Cosecha Dorada (18), moscatel romano, seco y alicantino embotellado por Bodegas Gutiérrez de la Vega a la salud de Montserrat Caballé y con ‘La dama del armiño’, de Leonardo da Vinci, en su etiqueta. Buena elección.

(es la vez que más le ha gustado la Caballé, a Igor Cubillo)

web de La Seu

ver ubicación

Carrer Loreto, 59; 03700 Dénia (Alicante)

96 642 44 78

info@laseu.es

La Seu es parte del ‘imperio’ de Federico Cervera, también propietario de otros restaurantes de Dénia, como Ca Pepa Teresa, Els Tomassets, Primera Línea, Casa Federico (aka Les Marines), La Senia de Federico (Hotel Nou Romà) y Al Forn del Deveses. Está lanzado, Federico.

3 Comentarios

  1. zuloko /

    -Farrah Fawcett muere y va al cielo, y Dios le pregunta si desea alguna cosa. Ella contesta diciendo «Quiero que todos los niños del mundo estén a salvo y felices». Así que va Dios y mata a Michael Jackson. FIN

  2. zuloko /

    Lo de tu bio y la efe me recuerda el chiste:

    -¿cómo te llamas?
    – Fara
    – ¿Ostras, Fara? ¡qué nombre más exótico!
    – Fí

    • Igor Cubillo /

      Jajaja. A mi, Zuloko, tu comentario me recuerda a ese otro chiste de me llamo Barbra… Ah, Barbra, americana?… No…
      No sabes ninguno con Farrah Fawcett???
      Abrazo.

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Ellos son la nueva cocina vasca. 7 Caníbales

¡Txotx! Se desborda la txinparta. Guía Repsol

Sal de Añana, miles de años brotando oro blanco. Gastronosfera

Postres pasiegos: la magia que produce la leche de los Valles Pasiegos. GASTRONOSFERA

Anchoas de Santoña, el milagro de la sal. Gastronosfera

Carolina, el pastel bilbaíno con nombre de mujer. Gastronosfera

Goxua, el postre vasco de inspiración catalana. Gastronosfera

Goxua, el postre vasco de inspiración catalana. Gastronosfera

Queso Camerano, la segunda vida de una receta milenaria. Gastronosfera

La borraja. Gastronosfera

A la conquista del ‘flysch’ de Getxo por tierra, mar y aire. Guía Repsol

Donosti en 9 paseos otoñales. Guía Repsol

Las perlas levantinas más sabrosas. Guía Repsol

Tiempo de angulas, cedazo y farol. Guía Repsol

Laguardia. Una villa guerrera, señorial y vinatera. Guía Repsol

Solar de Samaniego. Una invitación a beber entre líneas. Guía Repsol

La brava alegría riojana. Gastronosfera

Tudanca, carne de Cantabria. Gastronosfera

Chorizo riojano. Gastronosfera

Urdaibai. Margen izquierda del río Oka: historia, bosque y parrilla. Guía Repsol