Bar Txuntxurro (Irun). Curiosa, cuanto menos, su tortilla de patata
Cómo nos gusta la tortilla de patata. Hay que ver. La mejor es la de mi ama, claro, pero fuera de casa me empeño en comerla con café solo, antes del mediodía, o con un crianza, cuando no me quedan legañas, y sé lo que cuesta dar con una realmente buena en los bares. Y aun más en los de Donostialdea que en los del Gran Bilbao. De hecho, ni siquiera soy fan fatal de la tortilla del Txuntxurro, en Irun, una de las más reputadas de la provincia, que descubrí por indicación del escritor y cantautor local Jabier Muguruza. «Los mejores pinchos de tortilla de patata de Gipuzkoa, ejem, ejem. Pregunta a los músicos de Kiko Veneno. Todo está bueno, y es buena gente»; esto me dijo, hace ya casi ocho años. Pues bien, ya la he probado tres veces y, lo dicho, no me enloquece, aunque la como a gusto, conste. Y animo a hacer lo mismo.
En mi visión desapasionada tendrá mucho que ver, supongo, la decepción de mi primera visita al bar de Juan José Otero. Esa mañana entré al local rebosante de ilusión, pedí café y cogí por mi cuenta un pintxo de la barra: la tortilla, cortada en rectángulos y cuadrados, se disponía sobre grueso pan. El pincho que me tocó en suerte era pequeño, más bien, no muy aparente y estaba frío. Pasó sin pena ni gloria. Lástima. Y, para mayor escarnio, fui testigo de cómo a una señora le servían tres mucho más lustrosos, sacados directamente de la cocina. En apariencia, simplemente porque se los pidió al camarero, en vez de servirse ella misma.
No obstante, no me rendí. ¿Por qué me lo recomendó, si no, mi apreciado Muguruza? ¿Por qué un cuadro recuerda su condición de finalista del campeonato de tortilla de patata del congreso Lo Mejor de la Gastronomía (donde recibió el premio del jurado, por cierto)? ¿Por qué David de Jorge le concedió el reconocimiento a la mejor tortilla de patata del mundo mundial?
«Yo le pongo más huevos», asegura el propio Otero en entrevista fotocopiada y enmarcada en el bar. Había que comprobarlo (será por huevos), allí me planté por segunda vez y reconozco que la disfruté en mayor medida. Y caí en la cuenta de que se trata de una tortilla realmente diferente. Su estructura es curiosa, como en capas. Así, al ver la dificultad que entrañaba comerla, incluso con tenedor en el plato (imposible dar un bocado al pintxo en toda su envergadura, salvo que tengas la boca de Mick Jagger o del feo de los Hermanos Calatrava), pues se derrumbaba, la desarmé a conciencia y encontré en su interior trozos de huevo cuajado y una especie de láminas de fina tortilla, envolviendo a su vez la patata partida en pequeños trozos. Es lo que logra al hacer movimientos de fuera a dentro, con herramienta de madera, cuando la tortilla empieza a cuajar. ¿Un homenaje a la cercana rasa mareal de Deba y Zumaia? ¿La técnica del milhoja aplicada a la tortilla?
Otra conclusión es que Juan José Otero, además de utilizar aceite de girasol (en vez de oliva) y salar la patata (que no el huevo -hasta 18 por tortilla-) le pone menos cebolleta. Particularmente, la echo en falta, encuentro su tortilla un tanto sosita… Pero, insisto, recomiendo ir a probarla y juzgarla. Salvo evidencias, siempre es mejor probar las cosas, y no que te las cuenten. Y si en el debe pongo la escasez de cebolla, en el haber tecleo que durante mi visita sonaba soul y blues, buena música. Y también anoto los precios: café solo y pincho, 2,20 euros; pintxo, únicamente, 1,10 euros. Con ese precio, y esa reputación, lo mejor es que no te lo cuenten. Lo mejor es hincarle el diente.
Si lo prefieres, también puedes comer ibéricos, ensaladas, platos combinados, y cazuelas y raciones de platos tan sugerentes como las kokotxas de bacalao en salsa verde, los callos, el codillo asado con guarnición y los txipirones en su tinta. Pero sería un pecado perderse la tortilla.
Para quien sepa euskera, aquí van unos bertsos de Jose Mª Peñagarikano, recogidos en la web del bar, que el 28 de junio cumplió nada menos que 51 años al pie del cañón (el bar). Nuestra felicitación.
Nork ez du ezagutzen
Txuntxurro taberna?
orain berrogeita hamar
urte sortu zena,
Basterretxearena
diseinu gorena
ta telebista jartzen
Irunene aurrena,
nun da beste bat hainbat titulu duena?»
«Goazen Txuntxurronera
tortilak jatera»
«Txuntxurronera esan dut
ez beste batera»
mostradore gainean
beterik platera,
zenbatek egin duen
hori da galdera,
bat jatera joan da
lau janda atera.
Patatak oliotan
ta arrautzak hautsi,
gero danak nahastuta
pintxoak zein bitxi,
gabe gelditzeraino
askotan iritsi,
Graziana sortzaile
hemengo amatxi
hiru belaunalditan
geroz ez da itxi.
Hirurogeita bia
urte nabarmena,
Mafalda ta Spiderman
sortu zituztena,
ospetsua egin zen
Beatlesen melena,
eta Ferran Adrian
munduratu zena,
begira ze uzta den
Txuntxurro taberna.
(no niega la originalidad de esta tortilla, Igor Cubillo)
Plaza Pio XII, 5; 20302 Irun (Gipuzkoa)
943 61 50 84
Periodista y gastrósofo. Heliogábalo. Economista. Equilibrista (aunque siempre quiso ser domador). Tras firmar durante 15 años en el diario El País, entre 1997 y el ERE de 2012, Igor Cubillo ha logrado reinventarse y en la actualidad dirige la web Lo que Coma Don Manuel y escribe de comida y más cuestiones en las publicaciones Guía Repsol, GastroActitud, Cocineros MX, 7 Caníbales, Gastronosfera y Kmon. Asimismo, vuelve a firmar en El País y es responsable de Comunicación de Ja! Bilbao, Festival Internacional de Literatura y Arte con Humor. También ha dirigido todas las ediciones del foro BBVA Bilbao Food Capital y fue responsable de la programación gastronómica de Bay of Biscay Festival.
Vagabundo con cartel, se dobla pero no se rompe, hace las cosas innecesariamente bien y ya han transcurrido más de 30 años desde que empezó a teclear, en una Olivetti Studio 54 azul, artículos para Ruta 66, Efe Eme, Ritmo & Blues, Harlem R&R ‘Zine, Bilbao Eskultural, Getxo A Mano (GEYC), DSS2016, Den Dena Magazine, euskadinet, ApuestasFree, eldiario.es, BI-FM y alguna otra trinchera. Además, durante dos años colaboró con un programa de Radio Euskadi.
Como los Gallo Corneja, Igor es de una familia con fundamento que no perdonaría la cena aunque sonaran las trompetas del juicio final, si es que no han sonado ya. Sostiene que la gastronomía es el nuevo rock and roll y, si depende de él, seguiréis teniendo noticias de este hombre al que le gusta ver llover, vestirse con traje oscuro y contar historias de comida, amor y muerte que nadie puede entender. Eso sí, dadle un coche mirando al sol, una guitarra y una canción, una cerveza y rock and roll, y no le veréis el pelo más por aquí.
Tiene perfil en Facebook, en LikedIn, en Twitter (@igorcubillo) y en Instagram (igor_cubillo), pero no hace #FollowBack ni #FF.
Curiosamente realizando una busqueda sobre tortillas de patatas en guipuzcoa he acabado nuevamente en vuestro blog (que por cierto me gusta)!
y curiosamente yo soy de irun y he estado varias veces comiendo en el txuntxurro, pero sinceramente, la tortilla de patata la he comido un para de veces y sin más, no está mala, pero tampoco es un icono (tiene fama por Irun, pero yo lo se la veo).
Estate atengo a mi blog, que esta semana tengo preparada una entrada para el que considero el mejor pintxo de tortilla de patata de guipuzcoa, y como pista decir que no es ni de irun ni de donosti!!!
Un saludo.
Bien, procuraré permanecer atento a lo que publiques. Me gusta mucho la tortilla del Néstor, en lo viejo. Y en Pasai San Pedro me gusta acercarme al Begihaundi. Pero ya digo que no soy fan fatal de la que preparan en Txuntxurro, un tanto sosa para mi gusto, un tanto plana.
Gracias por leernos.
Un saludo.
Listo, espero que te guste!!
La de Begihaundi núnca la he probado.
un saludo.
Me alegra que sea esa la tortilla. La tengo pendiente, por recomendación de una amiga, Iñake, pero no he sacado tiempo para acercarme.
Ahora, tengo otro motivo para hacerlo.
Un saludo.