50 sabores
una pizza en Roma; un croissant en París; una hamburguesa en Londres; una espicha con sidra bien golpeada en Asturias; el marisco y el pulpo en Galicia; un txuletón en una sidrería de Astigarraga con varios ertzainas de paisano protegiendo, en los tiempos de plomo, a un compañero periodista amenazado de muerte, las miradas, el vacío, txotx; el mejor bonito a la parrilla en los altos de Mondragón, en un caserío donde invitaba rumbosa la Corporación a los Plumillas; la fabada y la ostra de Casa Gerardo; el bacalao al pilpil del maestro Elizegi; una costilla de cerdo ibérico con miel en la parrilla; darte la vuelta, en el coche, y la amiga de la amiga a la que ibas a dejar en casa te descubre el sabor de su boca y alguno más; ese sabor áspero del humo y toses; el sabor de la pérdida y la muerte que se te queda en la boca y nunca se va; el sabor de la victoria y el éxito, tan efímero que según lo saboreas ya se ha ido; la fruta tropical en una playa blanca, muy blanca, que casi cegaba; un roncito para que baje el calor, y funciona el remedio; el tomate orlando (dios lo bendiga); el wasabi y toses y te pica la nariz; el chile habanero; el pimentón picante; la sopa de pescado que hago yo; el helado de stracciatella en el Vaticano, ora pro nobis; el sabor de la normalidad y de la felicidad tranquila que da tenerte a mi lado, siempre.
Un donut graso, con una manteca que, después de estar en el bolsillo, se empezaba a disolver y lo comes con fruición en el recreo de la escuela nacional y te raspa la garganta con su astringencia; cerdo agridulce en el primer chino que se instaló en el País Vasco, colas en la entrada, un camarero dipsómano que bebía los restos de las botellas y un dueño que decía “amigos, familia»; un perrito caliente del salchichauto, a la salida del Coliseo Albia, con mucho ketchup; un primer beso, clandestino, en un parque de Portugalete, a escondidas y caliente y húmedo, enseñándome ella porque yo no sabía, y muy raro de encontrar esa lengua y luego no parar; un bocadillo de bacon crujiente por la mañana, casi al punto de estar quemado y que haga crunch al morder; el agua fría después de entrenar; un café muy negro a la mañana en las épocas de exámenes; las chuletillas de cordero al sarmiento que eran pocas y había que chupar el hueso; la sopa de ajo de mi abuela; el pollo guisado con mucha cebolla pochada; la primera cerveza; la primera cerveza negra: el primer trago de vino peleón; el primer trago de vino bueno cuando aprendí a beberlo; el primer trago de un vino excelente y saber que, después de eso, nada te sabría igual; la tortilla de patatas poco pochada con ese lúbrico juguillo del huevo deslizándose por la boca; el sabor a picante de una alegría riojana, llorando y anestesiándote la boca; los besos en el Puerto de Plentzia de una pelirroja a la que la boca le sabía a fresa, y no exagero; los besos de una morena una noche y despertar junto a su cama, sin saber qué hacía allí, con una sensación de irrealidad; el sabor a la pérdida cuando perdí lo que más quería y lloré, amargo sabor que no pasaba y se quedaba en la garganta; el agrio sabor del vómito y la enfermedad y la medicina;Dicky del Hoyo Periodista, multitarea, en red desde bastante antes de Internet. Le ha dado y le sigue dando a todos los palos del periodismo: cultura, política, nuevas tecnologías, prensa, radio, televisión e Internet. Trabaja para diversos Medios y también realiza labores de asesor para empresas y entidades. Aunque es del mismo centro de Bilbao es un poco Zelig por los afectos y se mimetiza perfectamente, allá por donde va, con el paisaje y el paisanaje. Cree que a este mundo hemos venido para disfrutar y en eso se empeña, sólo o en compañía. Estar en @lqcdm y la comunicación gastronómica es sólo una excusa para pasárselo bien y dárselas de connosieur.
@zuloko en twitter
Periodista, con especialización en nuevas tecnologías de la información, redes sociales, relaciones públicas, gabinetes de comunicación, Internet y vídeo.
Licenciado en Periodismo por la Universidad del País Vasco. Postgrado en Mecanización de la Información promovido por la Unión Europea. Estudios de Filología Inglesa.
Formación en multimedia, diseño web y gestión de empresas.
Radio Euskadi: redactor de informativos y director del programa especializado en nuevas tecnologías «Frontera Azul», galardonado con el premio MTV.
Radio Nacional de España: director de «A primera hora». Corresponsal de las revistas del grupo editorial Heres.
Euskal Telebista: redactor del magazine cultural «Vasta con Uve». Responsable del departamento de Publicidad de la televisión local Tele Donosti.
Sección de Internet y Multimedia de grupo audiovisual vasco Desarrollo de proyectos: deusto.tv , sitio web de la Fundación Buesa y otros.
Asesor de prensa en cosas. ¿Qué cosas? ¿cosas de gobierno? Sí, Peter, cosas del gobierno.
Orgulloso miembro (con perdón) del club de remo Kaiku (cuando ganaba). Hago karate (Shotokan) y subo montes y montañas y cojo olas. In the mood for love.
Añadir el sabor que nos han dejado tus recuerdos al evocar los nuestros. Gracias
Gracias! Abrazo!
…y el sabor de un bicadillo de bonito maridado con Coca Cola mientras se prepara el power point de una intervención en el Parlamento; besos a tornillo, Dicky
Besazos castos Javier que luego nuestras rezpectivas nos miranmal
Poeta!!! precioso…
abrazo grabde
Obrigado MM muito
Sólo te ha faltado el inefable sabor de un buenos días. Pero entiendo que te arruinaba el titular.
Muy grande, Zuloko.
Abrazo myfriend
Precioso, me ha encantado sentir por un momento todos esos sabores, olores…,gracias.
Un saludo Cruz, nos gusta que le guste. Regrese cuando quiera a esta su WEG