Hogar Dulce Hogar (Donostia). La comodidad del Chester
Hogar Dulce Hogar, una pastelería-cafetería-heladería que ofrece, en Gros, material de picoteo, hamburguesas con patatas, ensaladas, sándwiches, meriendas…
leer másHogar Dulce Hogar, una pastelería-cafetería-heladería que ofrece, en Gros, material de picoteo, hamburguesas con patatas, ensaladas, sándwiches, meriendas…
leer más(+59 rating, 12 votes)Cargando... Déjenme comenzar esta pieza con un alegato en defensa de la hamburguesa: señores, señoras, la hamburguesa es un invento cojonudo estupendo. ¿Qué puede haber de malo en unir una buena pieza de carne picada de calidad, algo de salsa sabrosa y un puñado de vegetales y hortalizas frescas? A ver, se me ocurre que uno de los inconvenientes puede ser la dificultad para comerla; imagino la torre original desparramada, con rodajas de tomate, hojas de lechuga y ruedas de cebolla bien pochada desparramadas por el plato. Lo acepto, es una posibilidad, pero eso ya lo tuvo en cuenta hace más de un siglo Charles Nagreen (o quien fuera su inventor, pues su ‘paternidad’ es muy discutible y discutida), quien resolvió meter todo entre dos panes. Genial. La solución permite disfrutar todos los sabores al tiempo, aporta movilidad al bocadillo (a su consumo) e incluso incrementa la satisfacción. Un buen pan aporta aroma, tacto crocante y sabor. Lo dicho, la hamburguesa es un invento cojonudo fantástico y la mala fama asociada, producto de los desmanes de las multinacionales del fast food, es injusta. Es como decir que los croissants son una porquería, porque los que hace el panadero de mi barrio son una masa gomosa y pringosa. Dicho lo cual, entenderán que me gusta comer buenas hamburguesas. En Getxo busco las del Gure Etxea, de las que hablé en su día, y las del Carpanta, de las que un día hablaré. Y en Donostia me gustan las de Va Bene. Es bien sabido, deje constancia de ello en una reseña de cierto calado en la que Iker dejó el siguiente comentario: «Va Bene está genial, ahora le ha salido una dura pero que muy dura competencia, Holly Burger, en la misma parte vieja y con patatas fritas caseras!!!!!». Tentador. Había que ir. Y fui. Acudí de noche y comprobé de primera mano que un mar de espejos aturde al neófito cuando avanza por el amplio comedor, y facilita sobremanera la tarea del espía, que puede aprovechar sus cruces y ángulos para desempeñar...
leer más(+97 rating, 23 votes)Cargando... La línea que separa la comida rápida de la comida basura es delgada y quebradiza. Sin embargo, aun quedan locales que dignifican el nombre de la hamburguesa, que no meten entre panes amasijos de grasa y cartílagos, ni te llenan el estomago con patatas congeladas de corte industrial, ni se ganan a nuestros niños con regalos, nombres en ingles y ríos de ketchup. En Donostia el oasis se llama Va Bene. Esta expresión italiana profieren la mayoría de los lugareños cuando se les antoja un bocata de carne picada. Sus hamburguesas son las más conocidas, arrastran fama de ser las mejores de la ciudad y llevan años y años siendo despachadas en la calle Blas de Lezo, entre carteles de Harley Davidson, Chevrolet, Texaco, matrículas de coche… Una ambientación de reminiscencias yanquis y aroma a neumático que puedes observar desde sus taburetes rojos de madera, siempre que ganes la posición. Hay otro Va Bene en el Boulevard, e incluso uno en Ibiza, pero nuestro favorito es el referido, el original, abierto en 1983. ¿A qué obedece su fama? ¿Por qué la gente se disputa sus mesas, principalmente en fin de semana? Buena parte de culpa la tiene la carne que trabajan, siempre avalada por el sello de calidad “Euskal okela”. Al menos, eso reza una carta que ofrece 13 hamburguesas diferentes (entre 3,90 y 6,05 euros), un abanico de combinaciones que incluye lechuga, tomate, cebolla, queso, crema de roquefort, pimientos del piquillo, pepinillo, bacon, revuelto de champis, mayonesa, salsa americana y huevo, frito y revuelto. Al menda y a su cuñado les va la número 13, por aquello de que, junto al bacon, la cebolla frita, el queso y un huevo turgente, lleva no uno sino dos filetes de carne rojiza y jugosa, muy bien ‘planchada’. Lo bueno, si doble, dos veces bueno. Carta de Va Bene Mi hermana es feliz con uno de sus sandwiches. Porque sí, la carta de Va Bene también incluye 12 tipos de sandwich (4,25...
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