III Sagardo Azoka (Donostia). Bendita sidra guipuzcoana

Publicado por Igor Cubillo en Destacado, Donostia-San Sebastián, Euskadi, Gipuzkoa, Productos | 4 comentarios

¿Se han preguntado alguna vez por el origen de la sidra? Tal vez su descubrimiento fue completamente casual, como el del vino, producto de la iniciativa o el olvido de un despistado antepasado que almacenó uvas con intención de degustarlas en otra época, fuera de temporada. Tal fue la demora en pensar nuevamente en ellas, ocupado cono estaría en guerrear o en conquistar a una bella dama, que para entonces la fruta era más bien un zumo. Y tal fue nuestra fortuna que la cosa había fermentado y el caldo resultante, pardiez, estaba rico; y alteraba la percepción de la realidad, lo cual no era poco en un tiempo sin cine, sin televisión, sin fútbol. ¡Hip!

Sí, yo tampoco creo que el origen de la sidra fuera siquiera similar. El cupo de fortuna lo agotó ese señor con el vino y en el caso que nos ocupa más me inclino a pensar que unos señores, fueran egipcios, bizantinos o celtas, se empeñaron en dar con ella. Quién sabe. Lo que sí es seguro es que, si no existiera, la sidra habría que inventarla.

Fresca, levemente ácida, gustosa, achispada, refrescante, euforizante… Qué rica está. Además, abre el apetito y el rito del escanciado fomenta el encuentro, alimenta sociabilidad y socialización. La sidra es un tesoro, vaya. Un tesoro bien económico, además (el PVP de cada botella ronda los 2€, en tienda). Y es garantía de calidad, cuando en su gollete luce la etiqueta de Gorenak, Sidras Selectas del País Vasco. Esta asociación agrupa ya a 13 productores guipuzcoanos que, hasta el próximo sábado, muestran su potencial en la III Sagardo Azoka que acoge la Plaza Catalunya, en Donostia. Allí, en pleno barrio de Gros, se ha instalado una carpa de 800 m² donde comer y beber entre acto y acto de la Semana Grande. Buen plan.

La sidra que se ofrece está bien buena, no hace falta remarcarlo, y se despacha a 5€ la botella (1€ el vaso). Y, alegría, también merece la pena la breve y sencilla carta de comida, un catálogo de pinchos, raciones y postre en perfecta sintonía con la bebida. Chorizo, morcilla, dos preparaciones de bacalao, chuleta, queso y dulce de manzana. Acompañamiento clásico e infalible.

Los pinchos (2,50€, la unidad) son realmente pequeños bocadillos nada pesados. El chorizo es gustoso, tierno y nada grasiento. Está muy rica la suave morcilla de verdura. Y nada seca la tortilla de bacalao.

¿La chuleta? Correcta, a 13,50€ la ración. Y el queso (3,50€), con esa especie de membrillo manzanil, gratificante, pese a su suavidad, a un carácter inofensivo que lo hace apto para todos los públicos, incluso para aquellos que afirman que no les gusta el queso.

He estado allí un sólo día, y me ha quedado por probar el bacalao en salsa (14€). Pero el resto, todo lo catado, me satisfizo y hace recomendable la visita a esta feria de Gorenak, que se promociona como «la selección vasca de sidra». Hombre, no corran al aeropuerto si les pilla en Nueva York, pero si andan por aquí, no lo duden. ¡¡Txotx!!

(le gusta el pipiripipipí, a Igor Cubillo)

web de Gorenak

Horario de la III Sagardo Azoka: de 12:00 a 16:00 horas, y de 19:00 a 00:00 horas.

Pincho de tortilla de bacalao, en Sagardo Azoka (foto: Cuchillo)